CLASE
DE CIERRE
En
nuestro ultimo encuentro, trabajamos en el laboratorio de computación. Teniendo
como actividad de cierre, un coloquio final, donde debíamos resolver un caso, a
partir de dos opciones planteadas (posturas de dos docentes frente al empleo de
las tics en su proceso de enseñanza), de las cuales, deberíamos optar por una y
convencer a los docentes, lo más creativamente posible, de considerar nuestros
fundamentos en sus métodos de enseñanza. Esta actividad, seria expuesta frente
a la clase, de forma oral teniendo como máximo tres minutos para compartir con
nuestros compañeros nuestras elecciones.
La
profe, nos invito a comenzar con dicha actividad de forma voluntaria,
exponiendo el caso que cada uno de nosotros había elegido para convencer y de
que modo creativo realizaría la propuesta. Algunos, optaron por llevar de
escrita su producción y leer su propuesta para la clase, y otros por explicar
oralmente su trabajo.
Los
que eligieron trabajar en base a lo que planteaba el “profesor González, tecnofobo”,
que de forma de síntesis, optaba por no usar las tics en su trabajo, puesto que
no las consideraba necesarias ni beneficiarias en el proceso de enseñanza y
aprendizaje de sus alumnos; expusieron: mostrarles la ventajas de las tics para
enriquecer su trabajo, demostrarle la omnipotencia que tienen en la actualidad
las mismas, la flexibilidad que le pueden ofrecer a su trabajo, modos de interacción mas
personal con sus alumnos, demostrándole las diversas formas de transmitir la
información y que los cambios no son malos. Todo esto a través de fotonovelas,
del contacto directo con el Internet, empleo de blogs, prezi, niños que saben
manejar las tics, etcétera.
En
cambio, los que eligieron trabajar desde la postura de la “profesora Giménez,
tecnofila”, quien empleaba las tics como único recurso didáctico dejando de la
lado los recursos tradicionales, al considerar que ya no eran útiles para la
enseñanza; expusieron: que los recursos didácticos eran irreemplazables,
necesarios, que no todos contaban con los recursos tecnológicos (tanto las
escuelas como los alumnos), no sabían como hacer uso de las mismas, no todos
los docentes estaban capacitados para incorporar las tics en su proceso de
enseñanza y su alcance no era el mismo en todos los lugares. Todo a través, del
contacto con el pizarrón, libros irremplazables, mostrándole casos, etcétera.
Si
bien, todos elegimos un caso en particular, estuvimos de acuerdo, en que se
debe plantear un equilibrio entre los recursos tradicionales y el empleo de las
tics, ya que ningún extremo es bueno y beneficiario frente al aprender de los
alumnos, que lo importante es poder enriquecer el trabajo del docente a la hora
de enseñar e incentivar a los alumnos al aprender.
Perfecto, Ivana! Has hecho una muy buena descripción de la actividad de convencimiento a una u otra autoridad con posturas extremas.
ResponderEliminarTe mando un cordial saludo,
Magdalena